$300 millones. Parte 3. Fe - Александр Невзоров

$300 millones

Parte 3. Fe

Alexander Nevzorov

© Alexander Nevzorov, 2017

ISBN 978-5-4485-7692-8

Created with Ridero smart publishing system

300 millones de dólares. Parte 3. Fe

17 de diciembre de 2016

Hoy empiezo a escribir la tercera parte del libro “300 millones de dólares” bajo el nombre condicional (3 partes) – Vera. Más precisamente, empecé a escribir este libro en ese entonces, en 2011, pero todos los registros que perdí. El título de la Parte 3 (Fe) sigue siendo puramente convencional, tal vez lo nombre de alguna manera diferente. ¿Qué me incitó a empezar a escribir 3 partes? Primero, la promesa dada al final del segundo libro, titulada “Felicidad”. Y en segundo lugar, que ambas partes anteriores son exitosas y han comenzado una “gran” “independiente” “vida”. El libro “300 millones de dólares” y su segunda parte La felicidad salió a la venta en todas las mayores tiendas en línea en forma electrónica y en forma de “impresión a pedido”. Se pueden comprar en Amazon, Ozon, Litres y otros sitios de Internet. Los datos sobre las ventas para mí aún no se conocen, lo reportaré más tarde. Además de estos 2 libros, tengo 6 libros de un tema diferente para la venta. Dos horóscopos, dos colecciones de poemas, un libro-juego y una guía de marcas (publicidad y economía-consumidor). Puedes leerlos. Todos los libros fueron escritos en diferentes momentos, la mayoría en el último año o dos, pero se ponen a la venta en este momento, el caso apareció. Pero es el caso? Por supuesto, no es el caso. Este es el mecanismo que se describe en 1 y 2 partes de mi libro “300 millones de dólares”.

¿Qué pasó durante este tiempo, desde el final de las entradas en el segundo libro “Felicidad”? Ellos (últimas entradas) están fechados de marzo a abril de 2011, es decir, hace casi 6 años. Mucho tiempo … ¿Mucho tiempo para qué? ¿Y cuál es el término en general? Ha desaparecido en el olvido (parece así hablar) mi pequeña empresa con el empleo. Actualmente, descanso de “dirigir” el espíritu empresarial (oficial). ¿Y por qué necesito todos estos problemas? Ahora (los últimos 2 años) me concentré (excepto escribir libros) en uno de mis grandes proyectos de internet. Está conectado con la publicidad. “Escape” de él, sin embargo, pero será, estoy seguro. Oficialmente, trabajé e ir a trabajar, donde recibió el dinero en un solo lugar, en el que tengo una cabeza libre (cerebro), manos libres (para grabar pensamientos), pierna libre – puede caminar (caminar) o sentarse.

Eso es todo por ahora, queridos lectores. Ya me he aburrido sin ti…

21 de diciembre de 2016

Mi trabajo actual me permite obtener todo el dinero de él, no para gastarlo por completo, sino también para posponerlo. No ahorro mucho, como bien, me visto bien y así sucesivamente. Pero el lector, por supuesto, está interesado, pero cuántos millones de dólares ya tengo. Específicamente. Pues bien, en la reflexión sobre este tema, llego a la conclusión de que la cifra exacta de los millones de dólares que pude, pero luego, al final del libro cuando se había terminado y decidir publicarla. Así intrigará. Un libro sin intriga es aburrido. Hoy, aquí, me gustaría escribir sobre otra cosa.

Yo (creo, como la mayoría de la gente) son algo supersticiosos. Desde hace algún tiempo he desarrollado una teoría que para mi número de la suerte es el número 9, y otros números cercanos a entero (10, 100, 1000, 100000, etc.), pero justo antes de que lleguen. Por ejemplo, 9, 99 o 98, 998, 997 y así sucesivamente. Y en cualquier combinación de números (por ejemplo, el número de un coche que pasa), he añadido los números para llegar al número, para mí feliz o no (como yo pensaba). ¿Por qué escribo sobre esto en el pasado? Sólo una vez, no hace mucho, decidí terminar este juego. ¿Cómo? Desde que lo inventé para mí, entonces yo mismo puedo pensar en una forma de salir de ella (del juego). ¿Y si el período feliz se “estiró” no a la siguiente serie de figuras que se han encontrado, sino al infinito, para siempre? Nada más decirlo que hacerlo. Un día, a la espera de “embestida” número de la suerte, me dije – que precipitó número de la suerte es válida ahora para siempre No necesito una combinación de números, su número de la suerte me llamó (la cola). Y no agrego más números y números. ¿Y por qué? Ya me he proporcionado la felicidad digital.

27 de diciembre de 2016

Han pasado 6 años desde que se escribió el primer libro “300 millones de dólares”. ¿Es esto mucho o un poco? La vida cambia, la gente cambia, cambia hábitos, opiniones, opiniones… Mirando hacia atrás en los años 2010—2011, entiendo que es el momento para mí fue, como se dice ahora “llegar al fondo”. Y el comienzo de escribir el libro fue un empujón (poderoso), que empujé desde el fondo y comenzó a moverse hacia arriba. Mirando ahora en el registro de 2010, veo que gran parte de lo que estaba haciendo entonces, ahora (para mí) no es en absoluto relevante. No participo en encuestas pagadas, no participo en programas de afiliados, no hago mucho de lo que era tan apasionado acerca de escribir antes. Esto no es porque me ha decepcionado en los programas sobre los ingresos en Internet, ahora estoy ocupado con otras cosas más interesantes para mí lo es hoy, incluyendo la web. Programas de afiliados, encuestas pagadas y otros servicios similares no han perdido su atractivo ahora, simplemente son más adecuados para los empresarios y los tiburones iniciales de Internet. ¿Qué estoy haciendo ahora? Acerca de esto más tarde.

Hay una visión un tanto paradójica, y comparto que es mejor hacer algo mejor enseñando a otros a hacerlo. Espero, declaro claramente. Todos los gurús (en este contexto – personas dedicadas a los secretos más secretos) de cualquier negocio (de negocios) son maestros (no voy a escribir esta palabra con una letra mayúscula). Y cuál es el significado de la palabra “Gurú” Wikipedia: “Gurú – digno, grande, importante, duro, establecido en la verdad, inquebrantable, maestro, maestro”. Resulta que el significado es el mismo. Todos los mejores profesionales en su campo son profesores. De ello se desprende que la mejor manera de ganar dinero es realmente ganar dinero. Y usted puede entrenar, entrenar, aprender y entrenar cualquier negocio. ¿Está bien? A nadie, absolutamente. ¿Se puede enseñar (aprender) la música de una persona (persona) que no tiene un llamado “oído musical”? Usted puede. ¿Es posible enseñar la pintura de aquél que no tiene esa actitud? Usted puede. ¿Alguien puede aprender a escribir poesía? Usted puede. Yo mismo he estado escribiendo poesía durante mucho tiempo, no hay nada complicado en esto. Si llega el momento y “llegar a las manos”, escribiré un libro “Cómo aprender a escribir poesía” para que todos puedan escribirlas (versos).

04 de enero de 2017

Quería llamar a esta (tercera) parte del libro “300 millones de dólares” “Vera”. ¿Por qué? Porque la base de mi presentación en este libro es la fe. Si usted cree, entonces usted está luchando por algo, si no, entonces no hay sentido en moverse en esta dirección. Y si no crees, ¿se puede lograr algo? Probablemente, es posible, por casualidad…

Existe la opinión de que cuanto más bajo es el nivel de desarrollo de una persona (la nación), más alto es el nivel de fe. ¿Es así o no? Tal vez sí. Pero después de todo, las personas desarrolladas (naciones) también creen en algo. No en la religión, sino en algunos principios, el dogma. En la democracia, en la libertad, en la iniciativa privada, en la posibilidad de un gran enriquecimiento (300 millones de dólares, por ejemplo). Y seguramente esto es también fe. El ateísmo es una creencia de que no hay dios. Resulta que la fe es inherente a todos, quieren creer o no quieren, creen en algo o no creen. Algunos creen en una cosa, la otra en otra. Algo es lo mismo, algo es diferente. ¿Serán 300 millones de dólares recibidos por aquellos que creen que los recibirán? ¿O recibirá a alguien que no cree? ¿O nadie recibirá? ¿O alguien lo conseguirá, pero no depende de la fe? Juzguemos la historia. Por ejemplo, creo que voy a recibir estos 300 millones. Y el tiempo pondrá fin a esta disputa. ¿Pero quién discute conmigo? Solo yo mismo